Seguidores

domingo, 28 de julio de 2019

Vivir entre dos Parques Naturales

Vivir entre dos Parques Naturales con tantos biotopos y tan diferentes como el P.N. de Los Alcornocales y el P.N. del Estrecho (Cádiz), te da la oportunidad de disfrutar día a día, de forma cotidiana, de la rica biodiversidad que hacen de estos Parques un lugar único. El fenómeno de la migración de las aves forma parte del paisaje, convirtiendo los cielos en autopistas de aves viajeras que llegan o se van del continente y que usan estos Parques Naturales como lugares de descanso antes de partir, como zonas de campeo o como lugares de nidificación.
Sólo basta un paseo por cualquier camino para observar una infinidad de especies de animales y vegetales, muchas endémicas. En los días calurosos, los lagartos y serpientes se calientan en los bordes de los caminos observados por las águilas culebreras. Infinidad de aláudidos merodean por los campos sobreexplotados en busca de alimento y lugares seguros donde hacer sus nidos y reproducirse. Miles de cigüeñas, milanos, halcones abejeros, abejarucos, garcillas bueyeras, buitres leonados y un sin fin de especies, pueden observarse de forma "casual" en las fechas correctas.
Al caer la noche, es el turno de los mamíferos. Zorros, tejones, garduñas, erizos y ginetas comienzan la jornada en busca de alimento dejándose ver con relativa facilidad, así como cientos de ciervos y decenas de jabalíes y algún que otro esquivo corzo moruno. Las salamanquesas común y rosada representan a los reptiles cuando cae el sol.
Los meloncillos son, junto con las nutrias (que habitan prácticamente cualquier curso o masa de agua del lugar), los que se dejan ver de día y con mayor facilidad.
Ratas de agua, lirones caretos, musarañas, topos, comadrejas, culebras de collar, camaleones, infinidad de invertebrados y sobre todo, aves (incluidos rarezas de todo tipo) son otros de los muchos animales con los que te puedes encontrar en cualquier momento.






jueves, 4 de julio de 2019

Steropleurus come espermatóforo

El Steropleurus andalusius es un insecto del orden Ortópera y de la superfamilia Tettigoniidae.
A partir de del mes de julio, estos "grillos" se vuelven muy abundantes, viéndose por miles, y constituyendo la base de la dieta alimenticia de muchos animales insectívoros, como reptiles, aves o mamíferos.
Los tímpanos están situados en las tibias del último par de patas.
Se alimentan de cualquier tipo de materia orgánica, ya sea vegetal o animal, carroñeando incluso a mamíferos o ejemplares de la misma especie.

La hembra posee un largo oviscapto (aparato para la ovoposición de huevos bajo la tierra) que lo diferencia del macho. El macho coloca el espermatóforo cerca del oviscapto de la hembra. Parte del contenido en esperma es comido por la hembra como aporte nutritivo para recuperarse de la cópula y para prepararse para la ovoposición de los huevos.
En esta entrada podemos ver vídeos de estos ortópteros comiendo esperma, un ratón muerto e incluso excremento de ave. También se acompaña este breve texto con algunas fotos de distintos ejemplares, todos ellos observados, fotografiados y filmados en el Parque Natural del Estrecho.